HISTORIA DE LA EQUITACIÓN
Durante mucho tiempo el caballo era una pieza de caza para el hombre, por su velocidad y agilidad su caza era más difícil, pero gracias a las trampas creadas por los hombres, esto se facilitaba.
Durante la Edad de Bronce el hombre vio una posibilidad de convertir al caballo en algo más utilitario y que no solo sea un alimento, por lo tanto comenzaron a utilizar al caballo en el trabajo agrícola.
En la Edad Antigua el caballo se usaba en guerras. Los ejércitos contaban con una caballería, donde los soldados escogidos eran entrenados para manejar al caballo durante las épocas de guerra. Además, en esa época apareció el caballo históricamente famoso llamado Bucéfalo, el caballo de Alejandro Magno que fue capturado y domado por él. Durante esa época también fue inventado el estribo en China, lo que provocó una evolución grande en el mundo ecuestre, ya que los guerreros montados a caballo podían ganar al rival con más facilidad con su lanza o lanzando flechas precisamente sin detener al caballo.
Durante la Edad Media se hizo muy famosa la caballería, por lo que comenzaron a aparecer Escuelas de Caballeros, en las que entrenaban a los caballeros para actuar en combate. Con el tiempo nació la equitación como deporte. La primera escuela de equitación fue fundada por el Conde de Fiaschi en el año 1539 en Ferrara, Italia. A su vez la caballería militar llegó a su fin, ya que apareció la caballería blindada.
Hasta 1900 se creó una nueva técnica de montar. La postura de inclinarse hacia delante cuando el caballo salta fue inventada por Federico Caprilli en el año 1902.
Antes de la Segunda Guerra Mundial la mayoría de las competencias ecuestres eran exclusivas para oficiales de caballería.
Al fundarse la Federación Ecuestre Internacional en 1921, se homologaron las reglamentaciones de las competencias internacionales, Juegos Olímpicos y otras disciplinas ecuestres.
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